Las contraseñas son como la ropa interior
No debes dejar que la gente la vea
Debes cambiarla con regularidad
Y no debes compartirla con desconocidos
Las contraseñas son como nuestra nuevo llavero, lleno de llaves para entrar a las distintas web, programas informáticos, ordenadores, teléfonos, tarjetas de banco y un sin fin de otras aplicaciones.
Desde hace 25 años estoy guardando contraseñas y evolucionando la forma de crearlas. Debo admitir que tengo un par de tablas en mi base de datos exclusivamente para las contraseñas, las mías y las de muchos de mis clientes.
Ya sabes, das de alta un servicio en la web y tienes que crear una identidad basada normalmente en tres elementos: nombre de usuario, contraseña y formulario de datos.
Yo suelo recomendar tener al menos dos contraseña: una dura y otra blanda.
La dura, contra mas larga y contra mas carácteres distintos escojamos, mejor, mas difícil será que alguien la recuerde y que la descifre algún programa para reventar claves. Elige una combinación sencilla, por ejemplo:
Te llamas Ana Vera Ruiz y naciste en enero de 1970: AnvErU+01mns
A ver… con el nombre y apellidos, la primera vocal (en mayúscualas ) y la primera consonante (en minúsculas), dos para el nombre, dos para el primer apellido y dos para el segundo apellido, luego el ponemos un signo «+» y a continaución ENERO lo convertimos en 01 (dos números) y al final m(il) n(ovecientos) s(etenta)…. fácil de recordar, ¿no?
La blanda, pues una de 8 caracteres para que no te mareen luego en los sitios que si la de 4 es muy corta, que si la de 6 no llega, una de 8 es suficiente, pues por ejemplo: soymujer
Ya está. Si dudas que alguien te ha levantado una o que quieres ir cambiando.. te recomiendo una variación simple de la anterior, así siempre probarás con una o con otra parecida y a la hora de que alguien se fije en como metes la contraseña, será mas complicado ya que observará que unas veces tocas unas teclas y luego otras.
Ah! lo de la ropa interior la tocamos otro día, a ver si los de google sacan alguna innovación para avisarnos cuando tenemos que cambiar de «gallumbos»… ;-))
Saludos.
Manu Atencia.